El confinamiento de los últimos meses a causa de la pandemia de la COVID19 ha provocado un aumento notable de las compras online, sobre todo en lo que se refiere al sector alimentación. Pero, ¿qué va a ocurrir ahora, en la nueva normalidad? ¿Cómo se va a comportar el consumidor? ¿Cuáles son las tendencias?

Según los datos del IV Observatorio para la Evolución del Comercio Electrónico en Alimentación –apadrinado por la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas) – podemos hablar de un nuevo consumidor: el consumidor de proximidad digital, aquel que suele realizar sus compras en tienda física pero que, al mismo tiempo, las complementa con el comercio electrónico (generalmente en la misma cadena).

Las conclusiones de este análisis también reflejan que un 31% de la población de nuestro país compra habitualmente productos de alimentación a través de Internet (unos 7 puntos más que el año pasado).

El estudio, en el que colaboran conjuntamente las universidades Complutense y Autónoma de Madrid, también pone de manifiesto el aumento del uso de los smartphones a la hora de realizar la compra online. De esta forma, pasaría del 10% al 38% en los últimos dos años.

¿Y qué ocurre con el comportamiento del consumidor y los hábitos de consumo? ¿Cómo es este nuevo consumidor de proximidad digital? La preferencia por el producto de marca y el uso de las listas de compra recurrentes son dos aspectos que el informe destaca, así como una reducción de las compras impulsivas y una menor influencia del precio en las condiciones de compra.

En todos estos datos aportados por el IV Observatorio para la Evolución del Comercio Electrónico en Alimentación la experiencia de las compras durante el confinamiento ha tenido mucho que ver. Muchos consumidores han perdido el temor al comercio online y la tendencia apunta a que gran parte de ellos sigan apostando por este canal como complemento a las compras físicas. Los datos muestran como el ‘consumidor mixto’ (que utiliza ambos canales) es el que más ha crecido en comparación con 2019, registrando un incremento de un 4.8%.

Este nuevo trabajo se ha basado en más de 4.000 entrevistas, realizadas en dos oleadas (entre noviembre de 2019 y febrero de 2020 y entre el 14 marzo y el 31 mayo de 2020).  Su objetivo principal es ofrece un análisis completo de cómo una crisis como la del coronavirus ha conseguido influir en el consumidor y en la tendencia general de la compra online de productos de alimentación y gran consumo.